Aca ya criticamos a juicio personal la trayectoria de Hugo Perez, y ya no vamos a seguir haciendo leña del árbol caído, también vamos a señalar que también hubieron muchas cosas positivas.
A pesar de los desafíos que enfrentó durante su gestión como entrenador de la selección salvadoreña, cabe señalar que también hizo importantes contribuciones al equipo nacional y al fútbol en el país, como por ejemplo traer muy buenos jugadores de nuestra diaspora como Zavaleta, Roldan, Cavalceta, Romero, Moreno, Martinez, los Gil y otros más que ya no recuerdo y por supuesto nuestro talento local.
Aunque cabe mencionar que esta fusión de jugadores locales y diaspora levantó una especie de barrera entre jugadores, sumando las constantes criticas de algunos medios y personalidades influyentes en el medio local, lo cuál impactó negativamente a lo largo de su proceso y que a mi percepción Hugo Pérez no pudo controlar.
Otro de los aspectos positivos que Hugo Pérez aportó fue su compromiso en proporcionar un mejor trato, medidas destinadas a elevar el nivel de profesionalismo en la selección, como entrenamientos de mayor calidad, nuevos uniformes, mejores alimentos, proposición de instalaciones adecuadas, mayor atención a las necesidades de los futbolistas, juegos amistosos con equipos de alto rendimiento y disciplina entre otros.
Como he mencionado en otras ocasiones anteriormente, los resultados negativos en el campo de juego durante su mandato finalmente empañaron algunos de estos logros, incluyendo esos juegos de copa oro en contra de México y otras selecciones competitivas de la región, que pusieron a los aficionados guanacos a soñar con una nueva revitalizada selecta.
En conclusión aqui murió un proyecto más, y de esos que prometía muchísimo en sus inicios, desafortunadamente hay muchos factores negativos que nuestro fútbol viene arrastrando desde hace muchos años, y del cual jugadores y cuerpo técnico siempre salen embarrados.